No es rutina... es alegría,
sentir que al llegar la alborada
entre sonrisas y porfías
tu sigues ahí, en mi morada.
Aprecio el latir del día a día,
captar el color de la primavera,
la calidez que procura el verano,
observar la policromía del otoño,
y estar al abrigo del invierno,
junto a la lumbre... y a tu lado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario