Suele ser las corrientes más usuales que invaden nuestras mentes. Es el
tipo de sociedad por el que circulan nuestros pasos. Basta con observar
películas, noticiarios, periódicos, novelas, etc, donde estos aspectos están
presentes, desmesuradamente presentes. En el cine, por ejemplo, se mata con una
facilidad pasmosa. En los noticiarios, no dejamos de ver malas noticias, muchas
de ellas de actos violentos… y todo ello circula ante nuestros sentidos con
aparente indiferencia. No parece importarnos nada que no sea sumirnos en
nuestra comodidad cotidiana, con nuestros instrumentos y objetos cotidianos. Desde
el sofá observamos como se masacran hoy en día poblaciones enteras, sin que se
atisbe la más mínima reacción social, estamos tan acostumbrados que ya nada
parece afectarnos. La guerra es algo ya tan habitual en cualquier lugar del
orbe… quizás porque no hemos aprendido nada de las dos guerras mundiales.
Seguimos esquilmando la naturaleza, seguimos emitiendo gases a la atmosfera con
total indiferencia. Sabemos de los efectos del cambio climático y del problema
que ello supondrá para nuestros descendientes, y no hacemos nada más que
observar y callar como si eso fueran cantos de sirena. Una parte de nuestros
políticos coquetean con la corrupción, o bien flirtean al acabar sus mandatos
con las multinacionales y sus consejos de administración, como prebenda de sus
servicios… y les seguimos votando haciendo oídos sordos a lo que se sabe a
ciencia cierta… es el Mundo que nos ha tocado vivir, y nos conformamos con
ello.
Si nos importara la sensibilidad… sencillamente, tendríamos más
empatía con el Planeta donde vivimos y con nuestros semejantes… nos
manifestaríamos global-mente más contra las atrocidades, apoyaríamos a todos
aquellos que luchan por construir y no por destruir, nos fascinaríamos más con
la belleza, con el arte, con la armonía… y por supuesto no permitiríamos que la
corrupción tuviera el permiso de nuestros votos. Desde nuestros puestos en la
sociedad, intentaríamos conseguir un Mundo mejor… aunque quizás lo correcto
sería decir, que intentaríamos reconstruir este nuestro Mundo ya bastante dañado…
Pero que quede claro que soy consciente de que estos planteamientos son
“chorradas” para muchos, demasiados de los habitantes de este Planeta… y así
nos va.
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