En la parte del hemisferio norte
que ocupamos, la Navidad
coincide con el solsticio de invierno, son las noches más largas… que dan pie a
un cambio de ciclo. Esto ha ocurrido durante milenios en la Historia y lo han
interpretado todas las culturas. Y ese hecho lo han sabido captar también las
astutas religiones.
Se interpreta la Navidad como un signo de
esperanza hacia el lado más noble del ser humano. Intentamos ser mejores… lo
intentamos. En esos días, se reúnen las familias, se olvidan los rencores, se
instala la alegría y también la melancolía por los ausentes…Luego cuando pasan
esos días, nos olvidamos de esa nobleza y repetimos los errores.
De que sirve entonces ese
espíritu… sigo preguntándome. Hurgo en
la reciente historia y obtengo una respuesta:
24 de Diciembre del año 1914, de
forma totalmente incondicional, olvidando los oficialismos y las presiones, dos
cuerpos de ejército, el del Imperio alemán y las tropas británicas, deciden
parar la guerra en el frente occidental… Pasaron las semanas y siguieron
despedazándose… pero en esos días, ganó la Navidad.
Resultado… creo en el espíritu de
la navidad, creo en la esperanza de ser mejores, creo en el ser humano… FELIZ
NAVIDAD
No hay comentarios:
Publicar un comentario