Toulouse, a finales del mes de
Septiembre, 2015
...A partir de
crearse la 35 Brigada, a cuyo mando estaba Marcel, empezaron las acciones de
guerra, primero esporádicas, como asaltar a las patrullas alemanas compuestas
por pocos hombres en los caminos y carreteras con el fin de arrebatarles sus
armas. Luego vendrían las ayudas desde Inglaterra a base de lanzamientos de
armas por paracaídas. Ya mejor armados, pudieron encargarse de efectuar
sabotajes, tanto en fábricas, como en vías férreas, y asaltos a pequeñas
guarniciones alemanas.
Era una
guerra, y en las guerras se mata y se muere… prefiero obviar detalles que mi
madre me ha contado, como pudiera ser la forma en que se desarrollaron algunos
de esos ataques donde también estuvo ella presente, así como de algunos
atentados unos fallidos, otros no, que se cometieron en forma desgraciada y en
donde también murió gente inocente…En Febrero del 43, por parte de la policía
de Vichy, hubo una gran redada donde detuvieron entre otros a Marcel. Algunos
fueron entregados a los alemanes y deportados a campos de exterminio, otros
fueron fusilados y Marcel juzgado por un tribunal francés, donde el fiscal lo
condenó a muerte por ser judío, polaco y comunista. Fue guillotinado cinco
meses después… Mi madre pudo salir
indemne de ese desaguisado y lejos de hundirse por la muerte de su marido, se
armó de valor para seguir en la lucha. Justo un año después, tomaba parte como
integrante de un grupo guerrillero en la toma de la ciudad de Foix, donde
aparte de liberar la ciudad, consiguieron que se rindieran un número ingente de
soldados alemanes. Pocos días después era liberada Paris, con el orgullo de
saber, siempre me lo recuerda mi madre, que de los primeros en entrar fueron
los integrantes de la 2ª división blindada, muchos de cuyos miembros eran
españoles, antiguos componentes del Ejercito Popular Republicano que habían
luchado en la Guerra Civil
Española. Este acontecimiento significó la desaparición del gobierno de Vichy y
la aparición del Gobierno Provisional de la República Francesa
con el general Charles De Gaulle al frente… la segunda Guerra Mundial estaba
próxima a finalizar…la segunda guerra en que participó mi madre, una como
perdedora y otra como victoriosa.
Pero en su
patria España las cosas no iban a mejor sino al contrario, el Generalísimo
Franco se encargó de endurecer la dictadura, lo cual hacía inviable la vuelta
de mi madre a su país de origen, y mucho menos siendo ella integrante del
partido comunista español en el exilio. A punto estuvo mi madre de participar
en el desastre del intento de invasión del Valle de Aran en Octubre del 44 por
parte de la AGE
(Agrupación de guerrilleros españoles). Las cosas no salieron como esperaban,
se suponía que ello provocaría un levantamiento popular en España, y desde el
previsible gobierno que instalarían en Viella, iniciarían una especie de
reconquista de España. Pero no hubo tal reconquista, fue un fracaso total ante
la enorme diferencia de fuerzas, Agrupaciones de guerrilleros aunque bien
organizados, ante un numeroso ejercito pleno de moral. Hubo muchos muertos y
detenidos que posteriormente casi todos fueron fusilados. Del resto de la
importante agrupación de guerrilleros, se calcula que unos 4.000, unos lograron
huir al interior de España para formar partidas de Maquis con infructuoso
futuro, y la mayoría retrocedieron hasta
la frontera Francesa donde fueron desarmados de nuevo, esta vez por los
miembros de la Francia Libre …
El General De Gaulle, en los albores del final de la
II Guerra Mundial, no debería de querer
líos, porque sobre esas mismas fechas, reconoció oficialmente al gobierno del
General Franco.
El Partido
Comunista Español, a partir de entonces cambió de estrategia y empezó a organizarse en el exilio desde sus
puestos centrales en la URSS ,
México y Paris. Mi madre junto con otros integrantes del partido y siguiendo
instrucciones, se encargó de mantenerlo vivo en el sur de Francia. Así conoció
a mi padre, Pierre Charrón, con el que se casó por segunda vez. Un buen hombre,
pero que según confesiones de mi madre aun reconociendo que fue feliz, siempre
me dice, que ni esa felicidad pudo nunca hacer olvidar a Marcel.
Posteriormente,
el Partido Comunista Español, tras la invasión de Checoslovaquia por la URSS en el 68, empezó a
distanciarse de la política de ese País para acercarse a Europa formando lo que
se denominó el Eurocomunismo, algo que agradaba más a mi madre como importante
dirigente que ya era. En el año 77, el gobierno español de Suárez legalizó el
Partido Comunista Español, opción que la hubiera permitido volver a España,
pero estaba casada con un francés, tenía la nacionalidad francesa y era feliz aquí,
por lo que decidió continuar en Toulouse. Al poco tiempo dejó el partido y se
enfrascó en luchas sindicales formando parte de la CGT (Confederación General del
Trabajo)… Pero un regomeyo por aquel entonces le rondaba a mi madre, algo que
está aun presente y por lo que sigue luchando pese a su avanzada edad, la Memoria Histórica ,
algo por lo que paralelamente a sus funciones sociales en Francia se ha
encargado siempre de movilizarse. Desde Francia, empleando infinidad de
recursos, apoyándose en miembros de de diferentes asociaciones para la Recuperación de la Memoria Histórica
en España, ha intentado recuperar de las cunetas los restos de su padre y algún
otro miembro de su familia para ofrecerles un digno descanso. No importa las
dificultades que se le presenten, lo seguirá intentando hasta su muerte y quien
sabe si cuando llegue el caso desde el más allá.
Para ello
siempre ha encontrado un paladín en su lucha en la figura de su hijo, quien soy
yo, Jean Philippe Charrón Molina… He de confesar que pese a los esfuerzos
realizados todos los resultados han sido infructuosos, hasta ahora no ha sido
posible encontrar los restos de mi abuelo. Como único consuelo valga decir, que
por lo menos muchos de esos intentos han servido para localizar a otras
personas en parecida situación a los familiares de mi madre…y como estamos en
el año 2015, valga también decir, que desde que existe el gobierno de Rajoy en
España, las ayudas han sido nulas, lo que redunda en mayores dificultades aún...
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